martes, 18 de septiembre de 2012

Hoy hablaré conmigo

Cuándo escribo,
esbozo mi proyección,
me esfuerzo y procuro cuidar hasta el último detalle,
nunca en busca de la perfección,
en realidad,

busco mi gratificación,
intento escuchar, mirar, y sentir,

percibir todas esas posiblidades,
desencriptar esos códigos,
que me acerquen a mi mismo,
que me permitan acercarme a tí,
con suavidad,

despertando lentamente,
consigo divertirme, sonreír, estar alegre...

realmente siento terriblemente tener que ser como soy a veces,
pero las personas somos como somos, 

unas son personas,
otras en cambio,
son gente,
solo son gente,
que pasa por la vida sin saber porque ha venido, probablemente ni les importe;
a mi tampoco me importa a que han venido.
He aprendido a dar importancia a las personas, y no a las cosas,

he aprendido que para hablar, primero hay que saber escuchar, que para hablar no necesariamente tienes que saberlo todo, pero si ser coherente y consequente con las palabras que digas,
por eso me gusta tanto escuchar, 

siempre y cuándo sea algo que despierte mi interés.
Me he dado cuenta de que el mundo esta enfermo, 

el materialismo se ha convertido en un claro factor en la gente de hoy en dia, el ya mítico "tanto tienes, tanto vales" contra el eslogan triste y mal elegido de la marca de relojes "Viceroy, no es lo que tengo, es lo que soy." Y me estas vendiendo un reloj...
la superficialidad es algo detestable, algo que me repugna con todo mi ser,
yo no soy para nada superficial, porsupuesto que me atrae la belleza,
como a todo el mundo,
pero nunca me quedo con la parte exterior, eso es lo que menos me importa,
porque lo que a mi me cautiva, lo que me llena, lo que me enamora, no se puede tocar,
pero si sentir, y me encanta sentir,
dejar de pensar,
y sentir, sentir esas sensaciones maravillosas que hacen que te olvides del mundo, y sus desgracias...
Y lo más bonito es cuando esas sensaciones, y ya no sensaciones, sino sentimientos, te los proporciona una persona...
Hay pocas personas que se han llevado un trozo de mi corazón, de mi alma, de mi ser.
y las considero tan afortunadas, como yo de formar parte de ellas...


"Porque la vida son instantes, lo que te hace sentirte vivo, son los momentos, esos fragmentos de segundo, esos minutos, o horas, o dias o noches,
que recordarás no siempre pero si durante toda tu existencia"



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