puede que este en obras, pero maestras,
escultura del olimpo,
hermosa y arrogante,
sabedora de su belleza,
sus raíces se enredan en mis pies,
me aferran a su vida,
a querer ser suyo,
igual que yo quiero que sea mía,
posiblidades logicas de un determinado ejecutor,
un solemne dictador acostumbrado a la sepultura ajena,
en clave de humor nadie es perfecto,
ni nadie sabe que es lo que quiere,
a menos que sin querer encuentre, lo que siempre hubo deseado.
"Entonces te das cuenta de que llega, como sabor por descubrir, que no hay factor que lo reponga, ni verdad más verdadera, que sentir que ni la palabra más bonita pueda igualar ese momento"
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